SUS MENTIRAS, NUESTRAS CONSECUENCIAS.

Existen personajes que por mucho que se empeñen en faltar a la verdad, no tienen más razónes en sus exposiciones, ni tan siquiera pudiera decirse que las tengan. Son personajes que realmente buscan dentro de la mentira, justificar sus actos, sus formas, actitudes  y maneras y que no les llevan a ninguna parte, además al final, todo ello se les vuelve en contra con el paso del tiempo. Lo hacen impulsivamente en cualquier cosa que hagan o que toquen.

Estos personajes me recuerdan a los existentes en la obra de Víctor Hugo “Los Miserables”,  dónde dichos personajes siempre intentan con sus engaños, artimañas y mentiras, sacar rédito propio de cualquier situación que se presente. Envueltos en sibilinos cantos de sirenas, esto personajes intentan hacer ver las bondades de su persona, su grandilocuencia, su saber estar,  y su máxima sabiduría siempre, es como si el mundo no existiese, pretenden ser cómo la única fuente de donde emana el conocimiento todo debe girar en pos de sí.

Se rodean de una aureola con la que intentan justificar esos conocimientos que ponen encima de la mesa y que no son más que experiencias pasadas que suman un rosario de circunstancias cuyas consecuencias nunca son vistas y que no llegan a ninguna parte,  solamente sirven para engrosar el ego personal de su currículum vitae.

Reptantes seres  que se sirven de oscuras artimañas para intentar comprar la voluntad de de otras personas e incluso intentan llevarse al huerto, todo aquello que se les pone enfrente utilizando mezquinas acciones amenazantes cuya consecuencia siempre buscan que esos personajes se salgan con la suya.

En algunos momentos aparece la resistencia al pensamiento único, es entonces cuando surgen los problemas dado que llevar la contraria a estos personajes supone  que te abran en canal, te saquen las entrañas y sean capaces de decir y de argumentar todo aquello que no existe, no existió, ni existirá núnca.

Se empeñarán en cambiar tus palabras y hacer de lo que ellos creen, una mentira que venden como verdad, difamando en lo más profundo y haciendo que la imagen de la otra parte se vea perturbada, nublada y difuminada por el peso de su propia soberbia.

En el mundo, las personas no son marionetas que se manejan como uno quiere, las personas tienen criterio propio, tienen dignidad; aunque también a veces hagan dudar de ello y saben lo que quieren y adónde van y las personas exigen respeto cordura educación y que desde luego no se ha invadido el espacio vital personal que cada uno y cada una tenemos y el cual debe servir, para que nuestra personalidad se desarrolle con sus sombras y sus luces pero será la de cada quien y la de cada cual, nadie necesita que le digan lo que debe de hacer o decir y nadie necesita de consejos que no llevan a ninguna parte sobre todo si no se piden y que desde luego, están vacios y son banales.

Yo me pregunto ¿Quién eres tú para decir a nadie lo que debe de hacer, lo que debe decir, lo que debe pensar y cómo debe de actuar? ¿Quién eres tú?¿Con qué derecho te atreves a hacer esto, quién te dio la potestad para poder gobernar la voluntad de nadie? ¿quién eres tú para decir lo quees cierto y lo que no  y quién eres tú para querer salvar el mundo con tus mentiras? ¿quién eres tú…?

Por si fuera poco y faltase algo son capaces de faltar insultar a sus iguales, son capaces de hablar de dignidad cuando ellos mismos son los que deberían revisar ese concepto dentro de su persona y sacar adelante una idea; entiendo,  mucho más a lo semejante a lo que debe ser la esencia de la Persona y no a la esencia que conlleva la maldad en los actos cotidianos.

Su arrogancia no dejan títere con cabeza, embaucadoras palabras y suave tono que conllevan el veneno más mortífero dentro de la actitud personal no dejará nunca, que tu propio desarrollo personal y la ayuda que los demás te puedan pedir salga la luz sin su beneplácito, sin haber hecho la corrección precisa y sin haber puesto la nota calificatoria de lo que esos personajes entienden debería ser la actitud precisa que ellos pretenden modelar dandoles la forma precisa con la que ellos quieren que  se vean,  para así poder tener control sobre el mal con el que se desarrollan los hechos personales contrarios a su voluntad, su forma de entender y a su dictado.

Personajes de fábula que por terribles podrían llegar a ser los eternos protagonistas de una acción presente, pasada y futura.

No respetar el intrinseco derecho de la Persona lleva a intentar tratar a los demás, como meras marionetas en manos de mentes que rayan la más extricta paranoia de seres despiadados y mezquinos.

Solamente quisiera decirles a estos seres, que si es esto todo lo que tienen que enseñar, desde luego por mi parte, ya me gustaría que se olvidasen  de mi existencia y que sigan su camino, en mi vida no hay lugar para el desencuentro aunque siempre mi puerta estará; en estos casos, entre abierta para el consenso.

Tanta paz llevéis como dejáis, feliz travesía y buen camino.
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https://youtu.be/p4_uJuAtCqA