LA PREPOTENCIA DE UN PIOJO RESUCITADO. “SALÍ LLORANDO DEL DESPACHO DEL CONSEJERO DE SANIDAD”

Posted on Actualizado enn

querido_consejero

“Paloma Pastor, delegada en Madrid de Hiru Hamabi (la única Asociación de daño cerebral adquirido infantil que existe en España) se reunió el pasado jueves con Sánchez Martos. Asegura que su trato fue “absolutamente denigrante, humillante y autoritario”

“Me sentí fatal. El trato del consejero fue absolutamente denigrante, humillante, autoritario… Yo me sentí como entiendo que a veces se deben de sentir las mujeres maltratadas. Acoquinada. No sabía qué decir. Este señor me estaba echando una bronca tremenda y yo no entendía el motivo”.
Paloma Pastor, delegada en Madrid de Hiru Hamabi, la única Asociación de daño cerebral adquirido infantil que existe en España, fue recibida el pasado jueves por Jesús Sánchez Martos en su despacho de la consejería. Pidió cita para reunirse con el consejero por los cauces ordinarios. Llegó a cruzar hasta cinco correos electrónicos con las secretarias de Sánchez Martos para confirmar los datos de las tres familias que iban a acudir a la reunión, todas con hijos con daño cerebral adquirido.
La reunión, según Paloma Pastor, fue muy tensa. “Hablamos de familias que están viviendo situaciones muy dramáticas y se encuentran en un estado de debilidad especial. El consejero, lejos de tratarles con cariño, les hacía preguntas de forma autoritaria, muy inquisidora… y ellos respondían como podían. También se dirigía a las dos subdirectoras como si fueran niñas pequeñas que no supieran hacer su trabajo. Las trataba como si fueran tontas, como si fueran ineptas. Estaban atemorizadas, como estábamos atemorizados todos los que estábamos allí porque su tono era durísimo, agresivo”.
Cuando los familiares terminaron de responder a sus preguntas, el consejero se negó a continuar la reunión. “El consejero me dice que a mí no me va a atender. Le explico que le he traído una documentación interesante, para que conozca los servicios y carencias de la sanidad pública en relación al daño cerebral sobrevenido, y que al menos coja la documentación. Me dice “váyase a dar una vuelta y venga dentro de media hora”, asegura Paloma Pastor. Cuando vuelve, asegura que llega “mentalizada para suavizar el ambiente” tras la tensión del encuentro anterior. “Pero ya no me deja hablar. Sánchez Martos empieza a gritarme. Me pregunta que quién soy yo para estar allí hablando con él, que qué formación científica tengo. Me acusa de mentir. Me dice que yo no formo parte de ninguna asociación y que me han investigado”.
Paloma intentó explicarle que en la pasada legislatura el Congreso aprobó una Proposición No de Ley para garantizar el acceso a la rehabilitación de los niños afectados y que era un tema importante que habría que llevar al Consejo Interterritorial. Según su versión, Sánchez Martos le espetó: “las PNL no sirven para nada y el Consejo Interterritorial de Sanidad, tampoco”. Como no dejaba de levantar la voz, asegura la delegada en Madrid de la asociación Hiru Hamabi, decidió callarse y esperar a que terminara la bronca para marcharse de allí. “Intenté mantener el tipo pero la verdad es que, en cuanto me puse de pie y me aparté un poco de él, se me vinieron las lágrimas a los ojos y me derrumbé. Me pilló desarmada y me rompí en ese momento y salí llorando. ¡Salí llorando del despacho del consejero!“

CONSULTA POR FAVOR LOS ENLACES DE ABAJO, GRACIAS.

MOVIMIENTO ASAMBLEARIO DE TRABAJADORES-AS DE SANIDAD

DAÑO CEREBRAL ADQUIRIDO INFANTIL

MI REFLEXIÓN;

Hoy me ha llegado un correo con este texto y la verdad es que la sensación de impotencia que he sentido no os lo podéis ni imaginar. Parece ser que ahora también algún ilustres consejero, es capaz de intentar dar lecciones de moralidad, formación académica, reprochar y hasta humillar a seres humanos que están intentando sacar adelante situaciones complicadas en muchas ocasiones sin prácticamente medios para ello.
D. Jesús Sánchez Martos, Usted debería tener en cuenta varias cosas y antes de que se altere, le voy a decir quién soy yo para decirle esto, mire, soy un ciudadano que llevo años pagando mis impuestos para que Usted coma todos los días y viva con una situación suficientemente desahogada.
Permítanme que le diga que su actitud es impresentable y si me lo permite como la de tantos otr@s de este país hasta indecente. ¿Se ha parado a pensar que culpa tienen esas criaturas de tener un daño cerebral sobrevenido? ¿Si Usted tuviera un caso de estos en su casa, que sería capaz de hacer?
Mañana señor consejero, puede que sea Usted el que tenga que vivir una situación similar, nadie estamos libre de poder padecer un ictus o de que un mal golpe no deje secuelas, mucho menos algunas personas son responsables cuando son concebidas y nacen a crecer desarrollando un problema de esta índole.
Mire D. Jesús, si usted tuviese escrúpulos; cosa que dudo, volvería a recibir a Paloma, le pediría mil y una disculpas y se sentaría sin prisas a escucharla y a intentar echarle una mano si no lo hace, Usted como persona no vale nada y desde luego no merece que le sigamos manteniendo una opípara situación personal.
Por el hecho de ostentar un cargo público, no es Usted ni otros como Usted, más que nadie, esto es difícil de entender y mucho más de comprender con personajes como con los que día a día nos tenemos que encontrar en nuestra vida diaria. Ya está bien si su culo le huele a Psicola, porque de la otra mejor no quiero ni hablar, la culpa no la tienen esas criaturas, la culpa la tiene solamente Usted mismo que no ha sabido conceptuar bien su ocupación y su avaricia le hace tratar a las personas como simples muebles.
No sé si algún día nos encontraremos pero no dude que si es así, todo esto se lo diré en su cara y lo haré así, porque ir a su despacho a contárselo no serviría más que de perder el tiempo pero con las ganas me quedo de coger a Paloma de la mano y acompañarla para poder dejarle a Usted y a gente como Usted las cosas bien claras.
Que tenga un buen día señor consejero y que la suculenta comida que hoy un día más le pagaremos entre todos; por mi parte, que le siente todo lo bien que le deseo en estos momentos, un cordial saludo y muchas gracias por su valioso tiempo.

P.C.G.- Madrid.

Deja un comentario